¿Puedo darle a mi perro diferentes tipos de alimentación?

Es una de las preguntas que más recibimos: ¿Le puedo dar diferentes tipos de alimentación a mi perro o gato? ¡Pues claro! Te contamos como hacerlo.

Tanto a perros como a gatos, al igual que a nosotros, les gusta tener una dieta variada. Comer lo mismo día tras día puede conducir al aburrimiento e incluso aumentar el riesgo de sensibilidad a los alimentos.

Variar la alimentación de tu perro o de tu gato le beneficiará, ya que en su dieta se incluirán diferentes tipos de nutrientes. Es cierto que hoy en día el pienso para perros o el pienso para gatos es el alimento preferido para alimentar a nuestras mascotas, pero ¡no sólo de pienso vive el perro o el gato!

¿Es bueno cambiar la comida de mi perro o gato?

Definitivamente, sí. A algunas personas les asusta cambiar la comida de su perro o gato porque pueda tener problemas estomacales, y en algunos casos esto es cierto, pero si tu mascota está sana y no tiene intolerancias o alergias, haciendo el cambio correctamente no tiene por que haber ningún tipo de problema. Simplemente asegúrate de que haces bien la transición de alimentos para perros o gatos.

¿Con qué frecuencia debes cambiar o rotar la comida de tu perro?

Esto dependerá un poco de tu criterio y de como lo lleve tu mascota. Hay gente que les cambia de comida cada día y hay gente que lo hace cada semana o cada mes.

En cualquier caso, no lo cambies repentinamente cuando le vas a dar un alimento nuevo. Debes comenzar a introducirle los nuevos alimentos en menor cantidad e ir aumentándolos a la vez que disminuyes el alimento antiguo.

Recuerda que, al igual que nosotros, cada perro o gato es diferente, así que serán ellos quien te muestren si está yendo bien o mal.

¿Cómo lo hago?

Alternando entre diferentes piensos

A continuación te explico, a modo de ejemplo, un proceso de transición entre diferentes piensos para perros, pero aplica igualmente para los diferentes piensos para gatos.

Imaginemos que tu perro se alimenta a base de pienso prensado en frío de ternera y quieres introducir en su dieta el pienso prensado en frío de ternera y salmón, cuando esté terminando su saco comenzamos a mezclárselo con el nuevo pienso hasta quedarse solamente con el nuevo pienso. Mira el plan de transición básico de alimentación más abajo.

Una vez veamos que el salmón le ha sentado de maravilla, podemos seguir el mismo proceso para introducirle el pienso prensado en frío de ternera y cordero o el pienso prensado en frío Akah HE Ternera (en este caso lo nuevo serán frutas y verduras).

Alternando entre pienso, comida deshidratada y comida húmeda

Esto realmente proporciona una gran variedad de nutrientes y texturas a tu perro o gato. No se aburrirá y su salud se beneficiará ya que además de alimento seco le estás aportando alimentos húmedos. Sigue el mismo proceso anteriormente explicado.

Añadiendo extras a su alimentación

También puedes añadirles algún extra de comida fresca o cocinada de casa, aceites o complementos alimenticios para perros y gatos como el aceite de salmón o el extracto de mejillón de labio verde. Siempre asegurándote de que no le estás sobrealimentando, ajustando las cantidades en consecuencia.

A modo de ejemplo ...

Te ponemos un ejemplo de combinación de alimentos en la dieta de tu perro, pero la combinación que elijas dependerá de tu perro y de tu presupuesto.

Imagina que tu perro o gato ha probado todos los productos de nuestra tienda, todo le ha encantado y le ha sentado bien. Como idea, puedes alimentarle de la siguiente manera:
DESAYUNO: pienso.
CENA: alternamos, una semana comida húmeda, y otra semana BARF deshidratado para perros. ¿Tienes, por ejemplo, brécol para cenar? Ponle un poquito a tu perro en la cena.

Plan de transición básico

Como ya hemos dicho anteriormente, cada mascota es diferente, así que algunos pueden tardar más en adaptarse a un nuevo alimento y otros menos, incluso los hay que no lo necesitan, pero para curarnos en salud aquí te dejo un plan básico de transición:

Síntomas que podrían indicar que el alimento nuevo no le sienta bien.

Si vemos los siguientes síntomas, podría ser que el nuevo alimento no le esté yendo bien.

• Heces descoloridas o sueltas.
• Defecación más frecuente.
• Defecación menos frecuente (estreñimiento).
• Hinchazón.
• Gas.
• Desinterés en comer.
• Beber cantidades excesivas de agua.

Así que, ¡ya sabes! En la variedad está el gusto.

¿Tienes alguna duda? Contáctanos aquí y te ayudaremos.